Explorar los acantilados, las islas, y los campos de este condado del oeste de Irlanda son la guinda ideal para cualquier astrovacaciones
06 June 2018 | Fuente: Ireland.com/Galway.es/Wikipedia
Para los amantes de la observación de estrellas y la aventura, la costa oeste de Irlanda es el lugar indicado. La naturaleza salvaje de este país se resume en el condado de Galway, situado en el mismo paralelo que Dublín. Su capital es la ciudad de Galway, vibrante y bohemia, y el punto más alto de este condado es el Binn Bhán (729 m), en la cadena de los Twelve Bens.
Pero no es lo único que los aficionados al astroturismo deben marcar en el mapa cuando visiten este rincón de Irlanda, porque el condado de Galway tiene mucho que ofrecer a los viajeros curiosos...
Los Acantilados de Moher, a unos 70 kilómetros de la ciudad de Galway, son la atracción natural más visitada de Irlanda y, sin duda, una visita obligada para los astroturistas. Imagínese el espectáculo que ofrecen las estrellas contempladas desde estos acantilados de aproximadamente ocho kilómetros de extensión en los que auténticas paredes de piedra negra caen a plomo sobre el Atlántico. Un paisaje excepcional, nominado para formar parte de las Nuevas 7 Maravillas de la Naturaleza.
Se dice en Irlanda que por cada estrella que dibujó Dios en el cielo, puso un millón de piedras en Connemara. Connemara es una región de llamativos paisajes y naturaleza, salpicada de lagos, colinas y valles. La guinda de este paraje verde es la Abadía de Kylemore, un palacio del siglo XIX construido como homenaje de un comerciante inglés a su mujer. El edificio está ubicado junto a un lago, frente al Parque Nacional de Connemara, otro de los enclaves favoritos para los amantes del astroturismo.
Al noreste de Connemara se sitúa la cadena de los Twelve Bens o Twelve Pins, doce picos no excesivamente altos desde los que se puede contemplar un paisaje diáfano y de belleza serena.
Otro punto idóneo para la observación de estrellas en Galway son las apacibles Islas de Aran, situadas en la costa sur de Connemara, al final de la bahía de Galway. Son un archipiélago de tres islas, Inis Mor, Inis Meain e Inis Oirr, pobladas principalmente por pescadores, pequeñas, con curiosos paisajes naturales y pequeñas aldeas con un carácter tradicional. Algunos de sus habitantes, incluso, hablan exclusivamente el lenguaje gaélico irlandés. La poca contaminación lumínica de las islas y su orografía hace que, en días despejados, sean un lugar clave para mirar el firmamento.
Esperamos haber despertado su interés hacia Galway, este condado de Irlanda de salvaje belleza natural que sorprenderá a los astroturistas con el contraste entre sus apacibles paisajes verdes y sus impactantes acantilados. Y si dejamos un poco al margen la observación de estrellas, le recomendamos que no olvide visitar la capital, la joven y chispeante ciudad de Galway, donde hasta los astrónomos más entregados, se sentirán contagiados por su espíritu artístico y su energía.