Según Martínez-Lombilia del IAC, nuestra galaxia "aumenta de tamaño a medida que las estrellas se forman en las afueras”
05 April 2018 | Fuente: IAC/Space.com
Nuestra galaxia, la Vía Láctea, está creciendo más rápido que la velocidad del sonido a medida que surgen nuevas estrellas en su interior, según sugiere un nuevo estudio. "La Vía Láctea ya es bastante grande", dijo en un comunicado la autora principal del estudio, Cristina Martínez-Lombilla, candidata al doctorado en el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), situado en la isla de Tenerife.
"Pero nuestro trabajo muestra que al menos la parte visible de ella está aumentando lentamente de tamaño, a medida que las estrellas se forman en las afueras galácticas", agregó Martínez-Lombilla. "No será rápido, pero si pudieras viajar en el tiempo y observar la galaxia dentro de 3 mil millones de años, sería un 5 por ciento más grande de lo que lo es hoy".
La Vía Láctea es una galaxia espiral de unos 100.000 años luz de ancho que alberga varios cientos de miles de millones de estrellas. (Los científicos no están seguros del número exacto.) Es difícil medir el crecimiento de la galaxia directamente porque estamos en el medio. Entonces Martínez-Lombilla y su equipo miraron a otras galaxias espirales para que les sirviera de guía.
Los investigadores analizaron los alcances exteriores de varias galaxias espirales, utilizando datos de luz óptica recopilados por Sloan Digital Sky Survey e información sobre la ultravioleta e infrarroja recopilada por los telescopios espaciales Galaxy Evolution Explorer (GALEX) y Spitzer de la NASA, respectivamente. (Tanto GALEX como Spitzer se lanzaron en 2003. GALEX se retiró del servicio en 2013, pero Spitzer sigue funcionando hoy).
El nacimiento y el movimiento de estrellas que observó el equipo indican que las galaxias como la Vía Láctea se están expandiendo a aproximadamente 1.770 km / h, es decir, 1,4 veces la velocidad del sonido al nivel del mar aquí en la Tierra.
En el caso de la Vía Láctea, este crecimiento relativamente gradual se verá saturado en unos 4 mil millones de años por un evento dramático: una colisión con la galaxia espiral Andrómeda. Las dos espirales se fusionarán para formar la megagalaxia "Milkdromeda" (Milky Way y Andrómeda), según los astrónomos.