Descubra si tiene alguna de las características que distinguen a los amantes del turismo de estrellas frente a otros viajeros.
05 December 2018
Ha oído hablar del astroturismo y se siente muy atraído por el tema, pero aún no está seguro de que usted dé el perfil para ser un buen astroturista. Para sacarle de dudas hemos elaborado una lista con los atributos que no pueden faltar a cualquier apasionado del turismo astronómico. Y de paso, así entenderá con más claridad qué (diantres) es eso del astroturismo de lo que todo el mundo habla.
1- Interés por la astronomía. No, no significa que conozca todas las constelaciones o que sepa identificar qué es un objeto mesier. Pero siempre que mira a las estrellas se siente sobrecogido y cuando en televisión hablan sobre sondas espaciales que despegan o descubrimientos científicos sube el volumen de las noticias.
2- Afán viajero/aventurero. Entre quedarse en casa o salir de viaje unas vacaciones, lo tiene claro. Viajar es aprender, abrir la mente y conocer. Y todo eso va mucho con el espíritu del astroturista. Descubrir un sitio en el no había estado, o volver a disfrutar de aquellos paisajes que sus retinas no olvidan, es la ilusión del amante del astroturismo.
3- Curiosidad. El astroturista es por naturaleza un ser curioso que disfruta escudriñando los rincones del cielo. Su cabeza está llena de porqués, y su sed de conocimiento es insaciable, no sólo en el ámbito de la astronomía. No teme preguntar a los guías en las observaciones nocturnas, ni leer todo cuanto cae en sus manos cuando algún tema despierta su curiosidad.
4- Imaginación. La observación de estrellas va unida a un sentimiento casi romántico del universo y sus misterios. Es casi inevitable dejar los pensamientos volar cuando se contempla el firmamento y preguntarse, entre otras miles de cosas, por el origen de la vida, la inmensidad espacial o si estamos solos en el universo.
5-Humildad. Aunque no tenga todas las respuestas, cuando observa por un telescopio el astroturista toma conciencia de lo complejo y fascinante que es el universo. Asomarse al cosmos suele conferir una suerte de perspectiva global para hacernos entender que formamos una parte, aunque sea infinitamente pequeña, de ese sistema maravilloso.
6- Conciencia ecologista. Practicar turismo de estrellas es hacer ecoturismo y, relacionándolo con el punto anterior, tomar conciencia del valor que tiene cuidar nuestro planeta. Además, el astroturista, como buen viajero, sabe lo importante que es mantener protegidos los rincones más bellos de la Tierra para que las generaciones futuras también los puedan disfrutar.
7-Generosidad. Viaje sólo o acompañado, el aficionado al turismo de estrellas ama compartir sus experiencias. Hace fotografías, participa en foros y no duda en recomendar a sus allegados cuando descubre un nuevo lugar o experiencia.
¿Cumple alguna de estas características? ¡Enhorabuena! Ya puede considerarse un futuro astroturista, y se haya iniciado en el turismo de estrellas o todavía no, no dude en visitar los mejores destinos del mundo para poner en práctica su afición en nuestra sección DESTINOS.