Venerado, inhóspito y bello, así es el Cañón del Chaco en Nuevo México, famoso en el sector del astroturismo por ser Parque Internacional Dark Sky.
30 November 2017
El cielo nocturno del Cañón del Chaco ha sido considerado por muchos entusiastas del astroturismo y la astronomía como uno de los mejores lugares de América para mirar las estrellas. Hoy, en medio de este histórico paisaje, los visitantes pueden experimentar el mismo cielo oscuro que los Chacoanos observaron hace mil años.
La protección y conservación de la oscuridad del cielo nocturno es una prioridad en las tierras del Cañón del Chaco, no solo para el disfrute de los visitantes que miran las estrellas, sino también para el entorno natural. La vida silvestre nocturna depende de la oscuridad para sobrevivir, y los ritmos naturales de los humanos y las plantas dependen de un cielo nocturno inalterado. Al designar a más del 99% del parque como una "zona de oscuridad natural", en la que no existe contaminación lumínica, Chaco garantiza la preservación de estos ecosistemas nocturnos.
La oscuridad natural de la noche del parque, el compromiso de reducir la contaminación lumínica y las continuas iniciativas públicas han llevado a su certificación como un Parque Internacional Dark Sky (Cielo Oscuro) por parte de la International DarkSky Association (IDA). Chaco es el cuarto lugar en el Sistema de Parques Nacionales en obtener esta distinción. Al recibir esta designación en el nivel Gold, Chaco se clasifica como uno de los mejores lugares del América para experimentar y disfrutar de la oscuridad natural.
Una de las primeras que se hicieron en este sentido desde Cacho fue producir un inventario de las condiciones existentes del cielo nocturno que se utilizararía como base para un programa de monitoreo continuo. En un esfuerzo por preservar la oscuridad natural de Chaco y reducir la contaminación lumínica de las instalaciones del parque, el parque ha desarrollado pautas de iluminación al aire libre que cumplen con los estándares de International Dark Sky Park de la IDA. El parque también ha desarrollado una nueva programación interpretativa de cielo oscuro y, en asociación con la Sociedad Astronómica de Albuquerque, ha mejorado su alcance público a las comunidades locales.
Cabe añadir que además es el único parque nacional que cuenta con su propio observatorio, donde los visitantes pueden contemplar los mismos cielos plagados de estrellas que los chacoanos miraron hace mil años.
El Parque Histórico Nacional de la Cultura Chaco, más conocido como Cañón del Chaco, es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y alberga la más densa y excepcional concentración de pueblos en el Suroeste de Estados Unidos. Se trata de un cañón poco profundo de dieciséis kilómetros situado en la esquina noroeste de Nuevo México. En concreto se halla entre Albuquerque y Farmington, a más de 100 kilómetros de la ciudad más cercana y accesible solo por caminos de tierra, en un valle relativamente inaccesible en la árida e inhóspita región de las Cuatro Esquinas.
Este lugar es considerado como tierra sagrada de origen ancestral de los pueblos hopi, navajo y pueblo, que continúan manteniendo tradiciones orales que relatan su migración histórica del Chaco (entorno al año 1150 DC) y su relación espiritual con la tierra. De hecho, muchas de sus construcciones que aún se conservan en la zona fueron alineadas para capturar los ciclos solares y lunares, requiriendo generaciones de observaciones astronómicas y siglos de construcción experta coordinada.