Se trata de diminutos chorros de material que escapan de la atmósfera exterior del Sol y duran entre 20 y 100 segundos.
El resultado de ambas misiones es una visión de cómo el planeta es capaz de conservar su espesa atmósfera sin la protección de un campo magnético global.
El primer observatorio solar de China tiene como objetivo resolver los misterios de las erupciones del Sol y mejorar los pronósticos del clima espacial.
Del 5 al 9 de septiembre, reunirá a 500 profesionales de la Astronomía. Además del programa científico, hay programadas actividades abiertas al público.
Las últimas imágenes de Solar Orbiter, tomadas mientras cruzaba entre la Tierra y su estrella, muestran el Sol completo con un detalle sin precedentes.
El seguimiento de misiones históricas de la ESA, como Rosetta o Venus Express, se llevó a cabo desde los centros de la agencia europea situados en España.