Más del 70% de esta isla está protegida como Parque de Conservación de Nueva Zelanda y posee unos cielos nocturnos calificados como 'insuperables'.
26 July 2021
La primera isla santuario del mundo, la isla Gran Barrera, se encuentra ubicada a 88 km al noreste de Nueva Zelanda, frente al Golfo de Hauraki. Su nombre en maorí es Aotea, que significa nube blanca. Aunque su nombre haga referencia a las nubes, sus limpios cielos nocturnos, que le han valido el título de Santuario Internacional de Cielo Oscuro, son tan famosos como la belleza natural y bien conservada de esta isla neozelandesa.
Esta isla, con una longitud de 35 km de norte a sur, es un lugar increíble para visitar en cualquier época del año. Situada en el borde exterior del golfo de Hauraki, en el único Parque Nacional Marino de Nueva Zelanda, la isla Gran Barrera está a solo 90 kilómetros de la ciudad de Auckland, pero a un mundo de distancia de cualquier típico destino de vacaciones. Más del 70% de la tierra está protegida como Parque de Conservación y posee unos cielos nocturnos calificados como 'insuperables'.
Es la cuarta isla de mayor superficie de Nueva Zelanda. Inicialmente explotada por su riqueza mineral y los árboles de kauri, sus aproximadamente 1.000 residentes permanentes se ganan la vida actualmente de la agricultura y el turismo. El ritmo de vida en la Isla Gran Barrera es lento, regido por una forma de vivir tradicional que lo aísla del frenetismo del mundo exterior.
Con poca presión para el desarrollo y casi el 60% de su territorio bajo la administración del Departamento de Conservación de Nueva Zelanda como reserva natural, la Isla Gran Barrera ha conservado prácticamente toda su oscuridad natural durante la noche. Esas condiciones quedan protegidas además por la separación de la isla del resto del continente por el golfo de Hauraki y la ausencia de electricidad para el alumbrado público.
Lejos de las luces brillantes de la gran ciudad, la isla de la Gran Barrera es ideal para los observadores de estrellas. Desde 2017, toda la isla está certificada como Santuario Internacional de Cielo Oscuro por la International Dark Sky Association y hay empresas que ofrecen paquetes de astroturismo para poder disfrutarlos.
i viajas a Nueva Zelanda y visitas este paraíso, serás transportado a las maravillas del cielo nocturno una vez que el sol se ponga sobre el horizonte. La Vía Láctea atraviesa el cielo en el hemisferio sur y las nubes de Magallanes, que no son visibles en el hemisferio norte, se pueden observar con facilidad. El cielo nocturno está entretejido en la cultura maorí con Matariki, el surgimiento de la constelación de las Pléyades, que marca el Año Nuevo maorí.
Bien decidas ir por libre y simplemente disfrutar del espectacular cielo nocturno o hacer un recorrido guiado, no olvidarás fácilmente la noche en la isla Gran Barrera.