Se trata de un histórico Jardín Botánico situado en la localidad alavesa de Iruña de Oca, y se convirtió en Parque Estelar en 2015.
21 May 2024
Que España es un país con gran calidad en los cielos oscuros, donde el astroturismo forma parte del turismo de nuestro país, es un hecho. A todo ello se le suma que contamos con el primer Parque Estelar del mundo, una realidad que vio la luz en 2015. Te hablamos del Jardín Botánico de Santa Catalina, situado en la localidad alavesa de Iruña de Oca.
Para hablar de Parques Estelares, primero debes saber qué son. Todo se remonta a 2010 cuando la Fundación Starlight lanzó la campaña Parques de las Estrellas, conjuntamente con Astrónomos sin Frontera (AWB) y otras organizaciones.
Te interesa saber:
La idea es promover e identificar a nivel mundial la existencia de espacios en cada pueblo y ciudad donde se respeten las condiciones mínimas para el disfrute del cielo estrellado. Los Parques Estelares son infraestructuras ya permanentes, de muy variada entidad, que se instalan en lugares con un cielo limpio y oscuro y que permiten desarrollar actividades de divulgación y educativas vinculadas a la contemplación y observación astronómica.
Lógicamente existen infraestructuras que combinan ambos conceptos y, lo más importante, es su capacidad para difundir la astronomía y crear afición por saber más del Universo y de los avances que se logran en su conocimiento.
Después de cinco años, en el año 2015, el Jardín Botánico de Santa Catalina es acreedor de la distinción del primer Parque Estelar de España y del mundo por parte de la Fundación Starlight, que valoró las excelentes condiciones del entorno del Jardín para la observación astronómica y la realización de actividades para la promoción y observación del cielo nocturno en sus instalaciones.
Para conseguir dicha certificación, el Jardín tiene habilitada una zona especialmente destinada a la observación del cielo nocturno y en su programación anual se incluyen tanto observaciones astronómicas como jornadas didácticas con la instalación de un planetario Full Domme. Además de realizar actividades de observación del firmamento, como la organización de conciertos bajo las estrellas, sesiones de planetario Full Dom 360º y visitas guiadas nocturnas.
La Fundación Starlight, comprometida con la defensa de los cielos y la difusión de la astronomía, eligió a Santa Catalina como el escenario perfecto para eventos como serenatas estelares, proyecciones planetarias y recorridos guiados bajo la luna. El reconocimiento como Parque Estelar no solo celebra la pureza del cielo, sino que también impulsa el turismo responsable y la conciencia ecológica.
Por si fuera poco, Santa Catalina también es biodiversidad. Dado a su jardín botánico da cobijo a multitud de especies botánicas procedentes de varias zonas climáticas. Árboles milenarios, plantas fascinantes o curiosas flores que cambian de apariencia dependiendo de la estación e incluso del día, y que convierten cada visita en una experiencia diferente, viva e inolvidable.
Gracias a su ubicación, el Botánico disfruta de la presencia permanente de decenas de especies de aves como el pinzón, el petirrojo, el cárabo o el carbonero. Asimismo, aunque más difíciles de ver, en su entorno habita un amplio número de mamíferos como el jabalí, el corzo, la marta o la garduña.
Ubicada en las ruinas del convento, esta muestra permanente acoge decenas de especies de árboles en maceta propiedad de los miembros de la Asociación Bonsai Araba y permite conocer en primera persona algunos esplendidos ejemplares de este milenario arte de origen oriental.
Por su privilegiada ubicación, Santa Catalina es un excelente refugio para multitud de especies de mariposas. Además, en la zona de solana se han plantado plantas hospederas que favorecen el asentamiento y la reproducción de lepidópteros, lo que convierte al Jardín en un escenario perfecto para observar estos insectos.
Durante décadas, la entrada del Jardín estuvo presidida por un majestuoso Algarrobo que, tras secarse, reposa ahora en el interior del Botánico convertido en un original y hablador árbol que narra a los visitantes leyendas de este espacio natural y permite depositar en su interior los deseos, anhelos e ilusiones de quienes se acercan a este mágico rincón de Santa Catalina.
Un lugar mágico digno de visitar, aunque actualmente permanece cerrado porque están acondicionando los sistemas de riego e iluminación entre otros.