Las impresionantes imágenes de Betelgeuse tomadas con el VLT muestran no solo que la supergigante roja se desvanece, sino también cómo cambia su forma.
Este instrumento que pertenece a ESO puede ver objetos cuatro mil millones de veces más débiles que el límite detectable por el ojo humano.
El telescopio VLT de la ESO realiza este hallazgo gracias a la herramienta MUSE