Descubrimos esta provincia de Aragón, llena de encantos naturales y astronómicos, donde el astroturismo empieza a pujar con fuerza.
23 June 2021
Con la imponente presencia de los Pirineos vigilando su cielo, paisajes naturales que parecen sacados de la más fértil imaginación y un acervo cultural fruto de su esencia transfronteriza, Huesca es una provincia que para el astroturista merece la pena descubrir a sorbos, como si de un buen vino del Somontano se tratase.
Siendo una de las provincias con menor densidad de población de España, también lo es con uno de los cielos estrellados más impresionantes del país. Este hecho, sumado a los encantos paisajísticos del territorio, convierten a Huesca en una de las provincias con mayor potencial para el astroturismo de la península.
Enclaves como el Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara, el Parque Nacional de Ordesa y Monteperdido o el Monumento Natural de los Mallos de Riglos, Agüero y Peña Rueba (foto de portada) son visitados cada año por miles de viajeros que buscan experiencias de ecoturismo. Además de estar adecuados para disfrutar al máximo del senderismo, las rutas en btt o la escalada, al ser espacios protegidos, ofrecen espectaculares vistas del limpio cielo nocturno de Huesca.
En el entorno de los pequeños pueblos de montaña de las comarcas oscenses puede observarse el paso de civilizaciones desde la prehistoria hasta la actualidad.
En sus múltiples yacimientos arqueológicos, como el conjunto megalítico de Guarrinza o las pinturas rupestres del Parque Cultural del Entorno del río Vero, se observa la especial vinculación que el ser humano ha tenido con las estrellas desde sus primeros asentamientos.
La divinidad, representada por la luz solar, se manifiesta en las construcciones románicas y barrocas repartidas por el territorio de Huesca, algunas en enclaves tan espectaculares para ver el firmamento como el Castillo de Loarre o San Juan de la Peña.
Por su parte, las tradiciones festivas de las localidades oscenses conforman un valioso legado de la cultura pirenaica igualmente vinculada a los astros y la naturaleza, como la Falleta de San Juan de Plan, las fiestas del fuego del solsticio de verano en los Pirineos. Sin olvidar la relación de las Brujas de Laspaúles con la luna.
El Camino de Santiago también pasa por esta provincia, que regala a los peregrinos la posibilidad de disfrutar de impresionantes amaneceres y espectaculares paisajes, entre bosques, montañas y campos de cultivo.
Con instalaciones como el Planetario de Aragón como emblema del astroturismo, donde además se ofrecen multitud de actividades vinculadas a la astronomía (cursos de astrofotografía, acampadas nocturnas, fiestas temáticas para niños, etc.) y cada vez más establecimientos interesados en sumar el cielo nocturno a sus oferta, la provincia de Huesca se une a la imparable corriente del turismo de estrellas.
Ya lo sabes, viajero, si buscas naturaleza, patrimonio y cielo limpio, y sobre todo, si estás dispuesto a dejarte sorprender, nuestra sugerencia es que descubras este territorio, estrella a estrella.