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El cometa 12P/Pons-Brooks es un cometa del tipo Halley con un período orbital de 71 años y que no regresará a nuestros cielos nocturnos hasta 2095.
31 March 2024 | Fuente: ESA
El cometa 12P/Pons-Brooks o Cometa Diablo ya es visible en el cielo nocturno para los observadores del hemisferio norte, lo que ofrece una rara oportunidad para que los astrónomos profesionales y aficionados vislumbren un objeto conocido por sus espectaculares explosiones de gas y polvo.
El cometa 12P/Pons-Brooks es un cometa del tipo Halley con un período orbital de aproximadamente 71 años y un núcleo de aproximadamente 30 km de ancho. Ha sido observado durante viajes anteriores a través del Sistema Solar interior, lo que ha permitido a los astrónomos estudiar su comportamiento y características a lo largo del tiempo.
Estructura de un cometa // ESASu forma distintiva le ha valido el nombre de cometa "con cuernos" o cometa "diablo", pero en su lugar hemos elegido una referencia de la cultura pop que se basa en su papel como probable cuerpo padre de las "kappa-dracónidas", una pequeña especie anual de lluvia de meteoritos que está activa entre el 29 de noviembre y el 13 de diciembre.
Como otros cometas, 12P/Pons-Brooks está compuesto de hielo, polvo y material rocoso. Cuando se acerca al Sol, el calor hace que el hielo dentro del cometa pase de sólido a gas. El gas se escapa de la superficie del cometa, arrastrando consigo el polvo. Forman una gran nube y una cola que el viento solar empuja lejos del Sol.
La visibilidad del cometa 12P/Pons-Brooks varía. Cuando está muy activo y cerca de la Tierra, puede parecer muy brillante. Otras veces, puede aparecer sólo débilmente.
El cometa alcanzará su punto más cercano a la Tierra en junio de 2024. Sin embargo, en ese momento no será posible observar el cometa desde el hemisferio norte. Finales de marzo y principios de abril ofrecerán las mejores oportunidades.
Su punto más brillante será el 21 de abril, pero para quienes quieran verlo desde España u otros puntos del hemisferio norte, es posible hacerlo durante estos días, siendo el día 8 de abril una ocasión especial para ello // ESA Durante este tiempo, el cometa será visible en cielos despejados y oscuros sobre el horizonte occidental durante las horas posteriores al anochecer. Si tiene suerte, podrá observarlo con binoculares o incluso a simple vista, pero tendrá más posibilidades incluso con un telescopio pequeño, ya que su brillo es impredecible.
Los astrocuriosos deben estar en alerta porque este cometa 12P/Pons-Brooks no regresará a nuestros cielos nocturnos hasta... ¡2095!
Por otra parte, desde la NASA están invitando al público a participar con eventos en persona, oportunidades para hacer ciencia de la NASA y múltiples formas de verlos en línea.
La NASA ofrecerá cobertura en vivo del eclipse a partir de la 1 pm EDT. La cobertura del eclipse de la agencia incluirá vistas en vivo del eclipse desde toda América del Norte, apariciones especiales de expertos de la NASA, astronautas a bordo de la estación espacial y una mirada al interior de los experimentos científicos del eclipse de la NASA y fiestas de observación en todo el país.
La transmisión de la NASA durará tres horas y presenta ubicaciones en vivo de todo el país, incluido el único centro de la agencia en el camino de la totalidad, el Centro de Investigación Glenn de la NASA en Ohio.
Para poder ver el "Cometa Diablo" desde España y en las mejores condiciones, lo recomendable es mirar "hacia el oeste-noroeste después de la puesta del sol en las últimas semanas de marzo hasta mediados de abril", según explican los expertos de eltiempo.es. El mejor día para observarlo será, precisamente, el 21 de abril, cuando será visible con mayor claridad.
Se recomienda buscar un lugar con cielos despejados, oscuros y sin contaminación lumínica, y el empleo de prismáticos. El cometa estará bajo en el horizonte, cerca de la constelación de Auriga.
Además, la NASA también organizará una fiesta para observar el eclipse en español a partir de la 1:30 pm en el siguiente enlace de YouTube.
El cometa 12P/Pons-Brooks lleva el nombre de dos de los observadores de cometas más prolíficos de todos los tiempos.
El astrónomo francés Jean-Louis Pons (1761-1831) hizo la mayoría de sus descubrimientos utilizando telescopios y lentes de su propio diseño. Pons realizó 37 descubrimientos visuales de cometas entre 1801 y 1827, un récord que aún hoy se mantiene. Uno de sus descubrimientos se realizó el 12 de julio de 1812, cuando Pons divisó un objeto tenue que inicialmente carecía de la icónica cola de un cometa.
Durante el mes siguiente, el cometa se volvió lo suficientemente brillante como para poder verlo a simple vista. El 15 de agosto de ese año alcanzó su brillo máximo y presentó una cola distintiva.
Los astrónomos calcularon la órbita del cometa basándose en las observaciones de Pons y sugirieron que el nuevo cometa tenía un período orbital alrededor del Sol de entre 65 y 75 años.
Bocetos del cometa 12P/Pons-Brooks del 21 al 22 de enero de 1884 realizados por el astrónomo estadounidense Herbert Couper Wilson (1858-1940). El boceto del 22 de enero muestra claramente la característica doble cola de un cometa que se acerca al Sol // ESAEl astrónomo británico-estadounidense William R. Brooks (1844-1921) verificó accidentalmente estos cálculos durante el siguiente viaje del cometa a través del Sistema Solar interior. Brooks también fue prolífico: su total de 27 descubrimientos de cometas es superado sólo por Pons. Pero pronto se hizo evidente que el "nuevo" cometa que descubrió el 2 de septiembre de 1883 era en realidad el mismo descubierto por su rival espiritual 71 años antes.
Debido a la naturaleza dual del descubrimiento, el cometa 12P lleva ahora los nombres de ambos astrónomos.
Cabe destacar que 12P/Pons-Brooks se hizo famoso por las repentinas explosiones de gas y polvo observadas durante su aproximación al Sol en 1883, 1954 y 2023. Se cree que los registros de objetos brillantes en el cielo nocturno de China en 1385 e Italia en 1457 se pudieron realizar observaciones de 12P/Pons-Brooks.
Todo un acontecimiento estelar que se debe observar, aunque sea una vez en la vida.
