En octubre de 1957 los soviéticos lanzaron el Sputnik 1, un rudimentario satélite que dio inicio a la carrera espacial con los EEUU
06 October 2017 | Fuente: NASA/Space.com
En octubre de 1957, los radioaficionados rastrearon la primera señal de una civilización espacial... Desafortunadamente éramos nosotros mismos. Sin embargo, el satélite soviético Sputnik, que cumple su 60 aniversario, anunciaba el comienzo de la era espacial que ha llevado a los seres humanos a salir por primera vez del planeta Tierra.
Sputnik 1, el primer satélite en órbita alrededor de la Tierra, fue lanzado el 4 de octubre de 1957 año desde un lugar de Kazajstán, (entonces parte de la URSS). Los soviéticos habían planeado hacer un sofisticado satélite científico, según Cathy Lewis, comisario de programas espaciales internacionales en el Instituto Smithsonian en Washington, pero se sintieron bajo presión; querían lanzarlo lo antes posible porque reinaba una sensación de urgencia, dado que la URSS quería vencer a los EE.UU en el lanzamiento en órbita terrestre baja.
Según los estándares modernos, el pequeño Sputnik 1 no era muy impresionante. Una esfera metálica, con cuatro patas delgadas, que pesaba 83 kilos. De hecho, lo que lanzaron los soviéticos tenía sólo un conjunto de baterías, un transmisor para que los radioaficionados pudieran rastrearlo y un interruptor que se activaba por presión y que podía indicar a los controladores de tierra si la bola metálica de 58 centímetros de diámetro había sido perforada por un micrometeoróide. El satélite estaba bloqueado en una órbita terrestre baja elíptica, es decir, desde 215 a 938 kimómetros de la superficie del planeta.
El Sputnik además tenía una superficie reflectante que la hacía visible desde la superficie de la Tierra en ciertos momentos del día. Después de 22 días (ocho más de lo previsto), las baterías de Sputnik cedieron y la señal de radio se detuvo. El 8 de enero, Sputnik 1 se quemó en la atmósfera de la Tierra, viajando 7 millones de kilómetros a través de 1.440 órbitas.
La URSS había planeado lanzamientos de satélites desde enero de 1956 y los Estados Unidos desde 1955. Ambos países esperaban que sus primeros lanzamientos tuvieran lugar durante lo que se había denominado el Año Geofísico Internacional (IGY), que se extendía desde el 1 de julio de 1957 hasta el 31 de diciembre del 1958. Coincidiendo con esto, el IGY tenía la intención de marcar un nuevo período de cooperación entre los Estados Unidos, la URSS y otras naciones. Ningún anuncio de lanzamiento recibió mucha atención hasta que la URSS lanzó Sputnik y sorprendió al mundo.
"Por primera vez en EEUU, el pánico al lanzamiento de armas nucleares cobró vida" cuenta Cathy Lewis. Y este shock en los los Estados Unidos se debió en parte a una creencia generalizada en cuanto a la superioridad tecnológica americana, que se veía puesta en entredicho por el lanzamiento del satélite Sputnik.
"Estados Unidos tenía una imagen de los soviéticos como tecnológicamente limitada", señala Matt Bille, historiador y autor de "The First Space Race". Por eso, el lanzamiento de Sputnik llevó al entonces presidente Eisenhower a impulsar la financiación de la educación científica en muchos niveles, de la escuela primaria a la universidad, y también a la creación de la Administración Nacional de Aeronáutica y Espacio (NASA), así como la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA)
Los lanzamientos de Sputnik fueron algo más que una llamada de atención para los Estados Unidos. En la lucha por demostrar quiénes estaban a la vanguardia tecnológica, la carrera espacial entre los rivales de la Guerra Fría nació: el primer ser vivo en el espacio (Laika el perro a bordo del Sputnik 2), la primera fotografía de la Tierra desde la órbita (Explorer 6 en 1959), el primer hombre en el espacio (Yuri Gagarin a bordo de Vostok 1 en 1961), y la primera mujer en el espacio (Valentina Tereshkova en Vostok 6 en 1963), y por supuesto, el primer hombre en la luna (Neil Armstrong en el Apolo 11 en 1969).
Yuri Gagarin, el primer hombre en el espacio
Neil Amstrong llegando a la Luna en 1969
En 1975 el Proyecto de Prueba Apollo-Soyuz puso fin a esta carrera espacial, ya que por primera vez los Estados Unidos y los Soviets colaboraron en una misión científica.
Hoy en día, más de 1.400 satélites operativos hechos por el hombre orbitan el planeta Tierra y su uso se ha integrado en nuestra cotidianidad, desde el móvil hasta el GPS del coche.
Gracias Sputnik.