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Un viaje por el espectacular cráter de Ngorongoro y el Serengeti, observando los animales salvajes de día y las estrellas por la noche
25 October 2017
La serena magnificencia del cielo nocturno de la sabana africana, los lejanos sonidos de la vida silvestre como banda sonora y la suave luz de la luna convirtiéndose en cómplice de una experiencia de astroturismo que le cambiará la vida: realizar un astrosafari por Tanzania, una de las mejores razones para viajar a África.
Nombres como Kilimanjaro, Zanzibar, Serengeti y Ngorongoro ya se han convertido en sinónimos de África, pero estos deslumbrantes lugares son solo la punta del iceberg de una tierra prodigiosa. Tanzania alberga más de una docena de parques y zonas de conservación, desde la enorme Reserva de Caza Selous (la mayor área protegida del mundo) hasta hermosos lagos como el Lago Victoria y el Lago Tanganica.
Por esa razón mucha gente elige viajar a Tanzania, la capital del mundo del safari. Pero a su habitual oferta turística, los operadores del país han incluido una nueva propuesta, que cada vez gana más adeptos, pensando en los amantes de la observación estelar. El astrosafari. Una experiencia que combina ver a las “estrellas de la sabana” con las que están en el firmamento.
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Así pues, desde el aeropuerto de Kilimanjaro, cerca de Arusha, puede llegar al espectacular cráter de Ngorongoro y las exuberantes cráteres de las tierras altas, antes de descender a la llanura del Serengeti para, acompañado por el guía de uno de estos astro safaris, dedicarse a observar la fauna de día y las estrellas de noche.
La isla de Pemba, en el norte Zanzíbar, es otro de esos lugares marcados como destino imprescindible de astroturismo (como puede comprobar en este vídeo).
La ausencia de contaminación lumínica le permitirá contemplar nebulosas y supernovas, extraños cúmulos globulares, estrellas, planetas y misteriosos fragmentos de la Vía Láctea, entre otros muchos fenómenos celestes que quedarán grabados para siempre en su retina y que le hará plantearse las grandes preguntas sobre el origen del universo, como seguramente hicieron en ese mismo lugar los primeros pobladores de la humanidad.
Es el más grande y pacífico de los países del este de África, más de una cuarta parte de la tierra de Tanzania ha sido reservado para parques nacionales y zonas de conservación. Tanzania es posee las áreas de vida salvaje más ricas de África; acoge en su zona norte a los famosos “Cinco Grandes” (Lepardo, León, Elefante, Búfalo y Rinoceronte) y la legendaria Migración Great Wildebeest.
La hermosa Zanzíbar frente a la costa oriental del país es uno de los paraísos isleños más reconocibles en el mundo, y su exótica historia como puerto de especias y esclavos solo se compara con la asequibilidad de sus numerosos centros turísticos de lujo.
Tanzania es también el hogar de más de 120 grupos étnicos diferentes, con los Masai, quizás la tribu más famosas del mundo. Con su icónica ropa de colores brillantes y su distintivo baile de saltos, son conocidos en todo el planeta por su adhesión a la tradición y sus amplias sonrisas. Un viaje a Tanzania también puede incluir una visita a los bosquimanos Hadzabe tradicionales, que aún llevan un estilo de vida cazador-recolector como lo han hecho durante milenios.
