Entornos Naturales Únicos para la Observación de Estrellas en Bolivia

Seguro que si piensas en Bolivia, te viene a la mente aventuras, curiosidad y tradición, un destino ideal para viajeros que busquen algo diferente, pero Bolivia además de ser todo eso, es un destino propicio para contemplar el universo y su cosmos, además de ser uno de los países mejor conservados de Latinoamérica.  

Separada de Perú por el lago Titicaca, Bolivia es un país de altas altitudes, con culturas mestizas, una fabulosa mezcla de tradiciones milenarias e influencias españolas (La riqueza humana de sus habitantes está compuesta por más de 30 grupos étnicos nativos). Además de todo ello, Bolivia también es naturaleza dado que posee una gran biodiversidad con más del 16% del territorio boliviano está clasificado como protegido. 

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Siendo su capital, La Paz, situada a 3500 metros, el gran boom de su turismo, los #astrocuriosos buscan rincones donde se viste con ponchos coloridos y largas trenzas y donde no hay que buscar el firmamento, porque cuando cae la noche y ya está presente ante los ojos. Si a menudo se conocen las estrellas de Bolivia por su impresionante salar de Uyuni, y es cierto que es uno de los mejores lugares para la observación astronómica, el país alberga otros rincones naturales que no se quedan atrás y desde turismodeestrellas.com te los mostramos:  

Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Avaroa  Laguna Colorada dentro de la Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Avaroa // Crédito: Alicia Ortego 

Ubicada en el suroeste de Bolivia, la Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Avaroa es un santuario natural que ofrece paisajes surrealistas y cielos oscuros ideales para la observación astronómica. Desde lagunas saladas hasta géiseres y volcanes, este parque nacional ofrece una experiencia única para explorar la belleza del universo en un entorno naturalmente protegido. 

Dentro de esta reserva destacan la laguna Colorada y la laguna Verde son elementos casi emblemáticos de la región, sin embargo existen muchas otras con enorme importancia. El caso de la laguna Totoral puede llegar a ser casi único por el elevado número de especies que abriga, no sólo en el humedal sino en sus zonas circundantes, esto considerando que es una laguna pequeña en términos de superficie.

Parque Nacional Sajama  El Parque Nacional Sajama es el hogar del pico más alto de Bolivia // Facebook / Hernan Luizaga Soria

Situado en el altiplano boliviano, el Parque Nacional Sajama es el hogar del pico más alto de Bolivia y ofrece un escenario impresionante para el astroturismo. El Parque Nacional Sajama está ubicado en el noroeste de Oruro, colinda con el departamento de La Paz y la frontera con Chile. Desde La Paz se llega hasta Sajama pasando por Patacamaya y luego hacia Tambo Quemado. En este recorrido se encuentra la localidad de Curahuara de Carangas donde es muy digna de admirar su iglesia, llamada "La Capilla Sixtina del Altiplano".

Con sus vastas llanuras y altitudes elevadas, este parque nacional ofrece cielos oscuros y despejados que permiten una visión clara de las estrellas y los planetas. Además, para vivir una experiencia única se puede acampar en el parque y disfrutar de una noche mágica bajo un cielo estrellado. 

Valle de la Luna  Paisaje nocturno en el llamado Valle de Las Animas dentro del Valle de la Luna, cerca de la ciudad de La Paz // Crédito: Raúl Demangel

A solo unos kilómetros de la ciudad de La Paz, el Valle de la Luna es un lugar surrealista que parece sacado de otro mundo. Con sus formaciones rocosas únicas y su paisaje lunar, este valle ofrece un telón de fondo impresionante para la observación de estrellas.  

La característica más famosa del Valle de la Luna en Bolivia es que allí se encuentra una enorme formación rocosa que se asemeja a un conejo. Los lugareños creen que esta criatura mítica fue enviada como un regalo de Dios .Además de su encanto natural por el día y su cielo oscuro estrellado por la noche, el Valle de la Luna también ofrece a los visitantes una experiencia cultural y espiritual única. Un chamán indígena realiza aquí ceremonias tradicionales, utilizando remedios elaborados con plantas que se encuentran en las montañas que rodean el valle de la Luna.